La filosofía moderna de contratación exige que los solicitantes reemplacen las descripciones pasivas de deberes pasados con evidencia convincente de logros e impacto. El mayor error que se debe evitar es simplemente enumerar las responsabilidades del puesto en lugar de destacar los resultados.

El Poder de la Cuantificación

Los gerentes de contratación analizan el rendimiento pasado para pronosticar su contribución futura, y las métricas ayudan a demostrar su valor de manera clara y memorable.

En lugar de afirmaciones vagas como “Mejoré la eficiencia”, utilice datos específicos, cifras, porcentajes o plazos definidos. Por ejemplo, en lugar de “Manejé un equipo”, escriba “Dirigí un equipo de 5 analistas, lo que aumentó la productividad del departamento en un 20% en un trimestre”. Incluso en roles sin impacto financiero directo (como investigación o RR.HH.), cuantifique en términos de alcance, eficiencia, calidad o tiempo (por ejemplo, “Gestioné un presupuesto anual de $500K” o “Disminuí el tiempo de incorporación de nuevos empleados en 10 días”).

La Fórmula XYZ: Estructura de Impacto

Para articular los logros de manera eficiente, se recomienda la fórmula XYZ:

Logró [X] (El Resultado/Logro), medido por [Y] (El Dato Cuantificable), al hacer [Z] (Las Habilidades/Acciones Utilizadas).

Cada punto debe comenzar con un verbo de acción fuerte en voz activa, seguido del resultado y la métrica.

El Dominio de los Verbos de Acción

El lenguaje utilizado debe ser específico y estar en voz activa. La voz activa dirige la atención a su contribución personal y usa menos palabras, liberando espacio valioso. Evite frases pasivas como “Fui responsable de” o “La promoción me fue otorgada”.

Utilice verbos dinámicos apropiados para la función (ejemplos):

• Liderazgo: Coordiné, Supervisé, Dirigí, Fortalecí, Administré.
• Investigación: Analicé, Investigué, Evalué, Sistematizé.
• Técnico: Diseñé, Programé, Construí, Optimicé, Mejoré.
• Logros Fuertes: Aceleré, Dupliqué, Inicié, Pionero, Reduje, Transformé.